La Inteligencia Artificial (IA) pasó de ser una tecnología experimental en centros de investigación a una necesidad diaria para consumidores y empresas en todo el mundo. Según el informe “El estado de la IA en 2021”, elaborado por la consultora McKinsey & Company, el 57% de las empresas de las economías emergentes había adoptado alguna forma de IA, mientras que para 2022 cuatro de cada cinco empresas planeaban aprovecharla en los próximos años.
“Las empresas están viendo como la Inteligencia Artificial, a través de herramientas como , Data Intelligence o bots, por ejemplo, proporciona una comprensión contextual entre todos los recursos digitales, ayuda a tomar decisiones más rápidamente y con mayor precisión, y cuenta la historia general detrás de puntos de datos dispares de maneras más útiles y aplicables”, dijo Raju Vegesna, Jefe Evangelista de Zoho.
Para 2023, las organizaciones utilizarán la IA para mejorar sus experiencias y procesos, para mejorar el funcionamiento interno de sus negocios.
Sin embargo existen retos para su utilización al aplicar soluciones en el futuro. Raju Vegesna destaca tres aspectos en que deben centrarse durante este año.
1. Apoyo a la privacidad de los datos
La adopción de la Inteligencia Artificial está incrementando las preocupaciones relacionadas con el uso de datos sin permiso de los usuarios. Según el informe 2022 Global Data Privacy, elaborado por Global Data and Marketing Alliance, el 49% de los consumidores se siente cómodo facilitando datos personales y el 53% cree que hacerlo es de vital importancia para mantener el panorama tecnológico moderno.
Las empresas deben demostrar total transparencia y facilitar el acceso a sus políticas de privacidad o, si no existen, redactarlas lo antes posible y ponerlas a disposición del público en el sitio web de la empresa, con estos cinco elementos que estipula la Comisión Federal de Comercio (FTC).
Notificación/Conocimiento: los consumidores deben saber que se va a recopilar su información, cómo se va a utilizar y quién la va a recibir.
Elección/Consentimiento: los consumidores deben tener la oportunidad de aceptar o rechazar la recopilación de datos, y en qué medida.
Acceso/participación: los consumidores pueden consultar sus datos en cualquier momento y realizar los ajustes necesarios.
Integridad/Seguridad: se informa a los consumidores de las medidas que toma la empresa para garantizar la seguridad y exactitud de sus datos, al tiempo que se ocultan detalles personales irrelevantes.
Cumplimiento/Resarcimiento: los consumidores deben saber cómo se solucionan los problemas y qué consecuencias tiene una mala gestión de los datos.
2. Eliminar los prejuicios de la Inteligencia Artificial
La Inteligencia Artificial debe ser entrenada, para que las empresas establezcan procesos y buenas prácticas que ayuden a eliminar las ideas preconcebidas sobre el uso y trato de datos de todas las fuentes utilizadas.
Junto a esto, las plataformas deben permitir una protección humana entre las fases de recopilación y procesamiento de datos del entrenamiento de IA, para eliminar cualquier rastro de datos personales, para proteger a los usuarios y garantizar que sólo existan piezas cruciales de información.
Es importante recordar que el sesgo sigue siendo un concepto en evolución y un objetivo móvil, sobre todo a medida que mejora el acceso a los datos. Por eso es esencial que las empresas se aseguren de que están escaneando rutinariamente la nueva información y actualizando en consecuencia sus criterios de sesgo. Si la empresa ha tratado sus datos como si fueran código, con etiquetas adecuadas, control de versiones, control de acceso y ramas de datos coherentes, este proceso puede completarse con mayor rapidez y eficacia.
3. La narrativa implacable de los medios de comunicación
Muchos medios de comunicación tienden a repetir y hacer hincapié en dos narrativas contradictorias. Por un lado, informan que la IA es una tecnología maravillosa con el potencial de revolucionar nuestra vida cotidiana de formas evidentes e invisibles. Por otro, siguen insinuando que la tecnología está a un paso de quitarle el trabajo a la gente y declararse señor supremo de la Tierra.
“A medida que la tecnología de Inteligencia Artificial se haga más omnipresente en 2023, cabe esperar que el enfoque de los medios de comunicación actuales siga siendo prácticamente el mismo, dividido y contradictorio. Sin embargo, es razonable anticipar un ligero aumento de las historias sobre violaciones de datos, ya que un mayor acceso a la IA conlleva una mayor posibilidad de que un consumidor pueda verse afectado,” puntualizó el Jefe evangelista de Zoho.
Esta tendencia podría exacerbar un poco el círculo vicioso: la IA no puede mejorar si no hay más personas usándola, pero es probable que las cifras de adopción se estanquen debido a los retrasos en la mejora de la tecnología.
Las empresas pueden allanar su propio camino, lejos del alarmismo de baja calidad de los medios de comunicación, adoptando el marketing directo al consumidor (D2C). La mejor forma de subvertir la narrativa de los medios es que las empresas construyan la suya propia a través del boca a boca. Una vez que los consumidores tienen en sus manos la tecnología en sí, pueden comprender mejor su factor sorpresa y su potencial para ahorrarles innumerables cantidades de tiempo en la realización de tareas básicas, o tareas que ni siquiera habían considerado que podrían ser abordadas por la IA. Esta estrategia de marketing también ofrece a las empresas la oportunidad de adelantarse a las noticias destacando las políticas de privacidad y los protocolos integrales en caso de problemas.