Todas las empresas tienen procesos internos o tareas muy especializadas para las cuales no existen herramientas de software que les ayuden a realizarlas. Si bien, muchas deciden adaptar programas ya existentes -y que no suelen ser los más adecuados-, hay un creciente número que decide crear aplicaciones 'a la medida' mediante soluciones de código bajo.
Las plataformas de código bajo brindan a las organizaciones una forma rápida, económica y efectiva para crear desde cero, piezas de software que apoyen actividades muy particulares. "Estas herramientas permiten armar aplicaciones o integrar funcionalidades con solo atrapar y arrastrar elementos previamente elaborados a un lienzo. La empresa puede cambiar nombres, diseños y funcionalidades fácilmente, para personalizarla", comenta Edgar Guzmán, Director de Pre-ventas en Zoho para América Latina.
El impacto de estas soluciones es tan grande que la analista IDC pronostica un crecimiento anual en su uso superior al 25% hasta el 2027, cuando el mercado global superará los U$65.000 millones. Entre sus usuarios están Disney, que creó una aplicación de reservas para sus parques de diversiones; el Gobierno de México, que combinó millones de hojas de cálculo en diferentes formatos, o el equipo argentino de fútbol Atlas, para capturar datos de sus hinchas en celulares.
Para Guzman, hay cinco claves para tener en cuenta al usar código bajo. Estas son:
1. Defina sus objetivos. El primer paso es conocer el propósito de la aplicación, su público objetivo, las características necesarias y cualquier requisito de integración con sistemas existentes. Tener un plan bien definido agilizará el proceso de desarrollo y garantizará que el producto final satisfaga las necesidades comerciales.
2. Elija la herramienta adecuada. Evalúe cuál plataforma de código bajo se adapta mejor a sus necesidades y ha sido usada en proyectos similares. Considere su facilidad de uso, su escalabilidad, las integraciones disponibles y el soporte del proveedor. Elegir la herramienta adecuada desde el principio ahorrará tiempo y recursos a largo plazo.
3. Eduque a sus equipos internos. Aunque las herramientas de Código bajo están diseñadas para ser fáciles de usar, podrían requerir algún nivel de formación para sacarles más provecho. Tome talleres o busque tutoriales que ayuden a su equipo a familiarizarse con la plataforma. Asegúrese de que el proveedor brinda soporte en español y cuenta con una red de socios de negocios que puedan ayudarlo de ser necesario.
4. La privacidad es una prioridad. Revise que el proveedor seleccionado siga las mejores prácticas de protección de datos, autenticación, autorización y codificación. De esta forma, garantizará que la información de su negocio no será vista ni utilizada por terceros.
5. Mejore sus aplicaciones de forma contínua. Por su flexibilidad, el código bajo permite crear versiones 'beta' de los productos, para recibir comentarios de los usuarios, aplicar mejoras e integrar nuevas caracteristicas en tiempo real. Esta característica permite contar con aplicaciones que siempre sean relevantes para el proceso que buscan cubrir.
Las empresas pueden aprovechar las plataformas de bajo código de manera efectiva para crear aplicaciones que cumplan con sus objetivos comerciales, al tiempo que minimizan el tiempo y los costos de desarrollo.